Monday, June 28, 2010

Crónicas de un mundial mundial

Domingo 27 de junio

10 am Me levanto descansado, y me alegro de no haber salido la noche anterior. Veo el partido de Alemania – Inglaterra desde la cama.

10:45 am Aprovecho el entretiempo para prepararme un bol de cereales con yogurt (dato importante ya que es lo único que iba a comer en todo el día).

11:30 am Termina el partido de Alemania. Me preocupo.

12:25 Me baño, me pongo la camiseta de Argentina, los lentes de sol, la mochila con la malla por si después vamos a la pileta y salgo para Lucky Bar.

12:30 Me cruzo en la calle con mucha gente con remeras de Alemania e Inglaterra. Los miro a los ingleses con cara de ¨jodete puto¨, es raro cruzarse con gente de todos los países que juegan el mundial.

12:35 Me cruzo en la calle con un grupo de cinco chicas muy lindas con remeras Argentinas, me saludan y yo las saludo con la mano. ¨Debería ser mas social¨ pienso.

12:40 Llego al Bar, muchas camisetas de México, pocas de Argentina. Pienso que ya no tengo tiempo de organizar para ir a otro lugar y que si Argentina pierde la voy a pasar muy mal.

12:55 Llega Joaquín, mi amigo mexicano, con dos amigas también mexicanas y con muchas ganas de gritar. Empiezan a cantar por méxico y yo me empiezo a poner nervioso. Pido mi primera pinta de Yingling.

13:30 Ya llega más gente. Pamela (ecuatoriana) quiere que gane México, Beth (Inglesa y Japonesa) le da igual, Dakota (gringo) va por México. Estoy perdido. Pido mi segunda Yingling.

13:50 Llega más gente. Decido que si no cantan por Argentina se sientan en otro lado. Primero dos colombianos, van por Argentina. Después dos Panameños, uno de ellos con la camiseta de Riquelme. Vamos mejorando.

14:00 Llega Martín Torrijos ex presidente de Panamá a ver el partido con nosotros. Le pregunto por quien va a hinchar: por Argentina. Lo dejo sentarse con nosotros. Tercera cerveza.

14:15 Me decido a juntar a todos los Argentinos presentes para cantar algo por que así no puede ser. Hablo con dos chicas que tienen la remera Argentina. Busco más gente con la remera celeste y blanca, encuentro otra chica: gringa, encuentro otro chico: gringo, encuentros dos más: de Costa Rica, otro con la remera de Boca: gringo. La puta madre, hay sólo tres argentinos en todo el puto bar. No importa, el amor por mi selección y las cervezas no iban a dejar que esto me detenga.
Los reúno a todos en el centro del bar, éramos como 8 pero claro, nadie sabe las canciones y algunos ni siquiera hablan español. No importa, se las enseño.
El gringo de Philadelphia propone cantar ¨vamos vamos Argentina vamos a ganar… vamos vamos Argentina vamos a ganar… yo te sigo a todas partes a donde vas… cada vez te quiero máaaaaas¨ y así hicimos retumbar las paredes del bar.
A continuación un costarricense buena onda propone cantar ¨volveremos volveremos… volveremos otra veeeeez… volveremos a ser campeones… como en el 86eeeeeiiiisssss¨ y por último les enseño la clásica ¨vamos vamos… Argentina vamos vamos a ganar, que esta banca quilombera no te deja de alentaaaaaaaar¨ y ahí hicimos un poco de presencia.

14:30 Dejo a los recién adoptados argentinos y vuelvo con mi grupo inicial que ya se hizo mucho mayor y con más diversidad de nacionalidades. También ya había jarras de cerveza, así que ahí perdí la cuenta de cuanto tomé.

14:56 Gol de Argentina!!!! Abrazo a los imparciales (Japonesas/Inglesas y ecuatoriana), me abrazo con los panameños, con los ex presidentes y los colombianos. Después me hago una corrida al centro del bar, donde había dejado a los Argentinos bien organizados y abrazo a mis nuevos amigos. Gol carajo!!!!

15:03 Gol del pipita. Misma celebración que el primer gol. Mínimo tres cervezas más.

15:15 Entretiempo. Intento sin éxito enseñarle las canciones a Beth. Pero es muy gracioso.

15:43 Gol de Tevez. Se desata la locura, comienza una seguidilla de canciones incontrolables a los saltos y con las banderas de Argentina que había por ahí incluyendo un ¨poné a Cuahutemoc la puta que te parioooooooo¨ y ¨y ya lo ve… y ya lo ve… somos locales otra vez¨. Se suman dos argentinos más que andaban por ahí.

16:30 Termina el partido, yo feliz saludo y abrazo a todo el bar. Muchos se van, entre la alegría y el alcohol no pido plata, termino pagando una cuenta de cien dólares.

16:45 La calle es una fiesta, todo el mundo está con Argentina, tocan bocina y saludan. Invito a todos mis nuevos amigos a una fiesta en una terraza de una hotel.

17:00 Llego al hotel, me da alegría ver algunos de mis nuevos amigos ahí.

20:00 Muchos tragos después, sigo bailando. Mi amigo mexicano tiene un pedo que no se tiene (como pasa cualquier jueves, viernes, sábado y la mayoría de los domingos)

24:00 Después de ir a la casa de un amigo a comer algo, me dispongo a comer algo más, pero quedo dormido al instante.

Qué hermoso día.

4 comments:

Inés Royo Oyaga said...

jajajaja,

No sé que me das más rabia no haber visto en directo: si a Beth intentando cantar en español, a ti pagando la cuenta de 100 pavos, a Joaco borracho como siempre, o a los gringos saltando cantando vamos, vamos, argentina.......

Bueno, sí que sé, todo!

LA PUTA QUE ME PARIÓ QUE QUIERO VOLVERme!

Firulo said...

espero que el proximo post con respecto a esto sea similar.
tengo mucho miedo.

diana yael said...

pense mucho en vos en este partido... me acordaba de cuando comprabamos un chocolate grande... muy grande.. con almendras o algo asi,.. y lo comiamos...
te mando beso y que este sabado estes/mos tan contentos otra vez...

Anonymous said...

Gran crónica Ioni. Me di cuenta que tu estadía en USA tiene dos consecuencias, una calamitosa (1) y otra excelente (2).

(1) Te estás preparando profesionalmente para dominar el planeta y tener a la mayor cantidad de gente agarrada de los huevos. (Lo positivo de este punto claramente negativo es que somos amigos hace mucho y calculo que tendrás cierta piedad conmigo).

(1) Lo bueno es que te convertiste en un gran blogger. Se nota que tenés cultura sitcom (no consumí ni consumo) y Simpsons (consumí bastante) y tenés talento para transcribir esas visiones de mundo a tus breves posts.

Brindo por ello!

Ah, y cuando seas grande quiero que me pongas de ministro de cultura.

Beso